Llegamos a las 5,20 de la mañana a Dubai y ya hay luz de día. Tramitamos la entrada. Hay enormes colas al principio en la frontera pero al empezar a acumularse la gente salen muchos más funcionarios y en menos de media hora ya hemos entrado en los Emiratos Árabes Unidos. Alquilamos el coche, lo cogemos y salimos de la ciudad sin mayores problemas. Dubai es una ciudad muy grande, llena de carreteras, autopistas, centros comerciales pero todo está aceptablemente bien indicado. Vemos el gran rascacielos del Bourg Khalifa que lo visitaremos el domingo antes de coger el avión. Partimos hacia Oman. La carretera es buena aunque sin demasiado interés o, quizás nosotros no sabemos verlo, pues apenas hemos dormido nada.
Al llegar a la frontera nos pasa una cosa que nunca nos había pasado. A Trini no la había dado de alta en el sistema por lo que no podía salir. Una situación absurda pues queriamos salir pero no podiamos por que no estábamos dentro. Al final unas sonrisas de los funcionarios y vamos a la oficina para entrar a los Emiratos, nos vuelven a hacer la entrada, y luego vamos al funcionario que se encarga de las salidas para hacer la salida. Entrar en Oman es fácil ya que si entras desde EUA no pagas nada por el visado. Cambiamos dinero en la misma frontera. Por cierto es la primera vez que vemos un puesto aduanero con Pizza Hut en las mismas oficinas.
De camino a la capital paramos en tres fortalezas, Al Hazm Castle y Al Rustaq que ambas están cerradas para largo tiempo pues las están restaurando pero al final podemos visitar la de Nakhal que la encontramos muy interesante pues ofrece una multitud de estancias llenas de enseresy unas bonitas vistas a los palmerales. La entrada vale 0,5 riales (1 euro).
Llegamos a Muscat y nos alojamos en el Sahara Hotel apartments delante del lujoso Safeer International. De hecho nos es un hotel normal pues es un enorme apartamento con salon, cocina,etc... La noche vale 37 riales (somos tres viajeros).
Nos vamos al pueblo marinero de Mutrah donde tiene la vista más conocida de Muscat en la que se ve la "Corniche" y una mezquita rodeada de antiguas casas de mercaderes. El Suq es realmente bonito, nos sorprende pues no esperábamos nada y en cambio, está lleno de lugareños ataviados con sus tradicionales trajes. Hay varios restaurante en la misma "Corniche". Hay que pagar para aparcar el coche (0,1 riales, o sea 100 baisas que equivale 0,2 céntimos de euro cada media hora).