Hoy es domingo y hemos decidido ir a Potsdam. Hemos empezado el día cogiendo el metro hasta la parada de Hansaplatz, para ver el Tiergarten que es un parque de enormes dimensiones con vida salvaje incluida. Allí hemos visitado el Monumento de la Victoria, un símbolo de Berlín., que se puede subir a la parte alta pero que ahora está cerrado. En la plaza de este monumento hay conjuntos escultóricos alegóricos de figuras importantes de la historia de Berlin y de Alemania. De aquí surge la strasse des 17 de Juni, que es bonita pues están muchas de las embajadas con unos edificios espectaculares. La de España no está aquí sino justo al lado del zoo, en un edificio enorme, monolítico, bastante feo por cierto.
Queremos coger el S bahn para ir a Potsdam, pero vamos andando un rato bordeando el zoológico y vemos llamas, avestruces y algún otro animal como las hienas.
Cogemos este tren para el que se necesita un pase o billete de 3 zonas (billete sencillo 3 €) y en media hora estamos en el centro de Potsdam. Hay un mercadillo justo al lado solo de telas tanto para venderlas al metro como para hacer patchwork, que parece que aquí son muy aficionados. Está abarrotado de mujeres (sobre todo) de todas las edades comprando telas y telas. La verdad es que te entran ganas de hacer algo.
Es la Versalles prusiana rodeada de lagos y bosques. Antes de los bombardeos de la RAF de 1945 que destrozaron el casco histórico, Potsdam, la capital de Brandenburgo era una joya del Barroco. Se restauró el antiguo palacio Real, del que solo se conservan las caballerizas que alberga el Parlamento Nacional. En verano zarpan barcos antiguos de vapor del puerto, pero ahora en Marzo no hay la posibilidad.
El origen es una aldea de pescadores eslavos llamada Poztupimi. Hasta 1660 pasó sin pena ni gloria hasta que el rey Federico Guillermo la escogió como residencia de la corte. En 1685 acogió a los hugonotes que habían sido expulsados de Francia, y eso hizo que se embelleciera con magníficos edificios. Más adelante se construyó Sanssouci, el palacio que nosotros hemos venido a visitar. Ya en 1838 quedó unida a Berlin por un ferrocarril y es este momento cuando comienza su decadencia.
Fue puesta de nuevo en orbita con la reunión en la iglesia de la guarnición del parlamento nazi después de la quema del Reichstag. La conferencia de Potsdam de 1945 asignó la ciudad al sector controlado por la Unión Sovietica y dada su proximidad a Berlin, asentó en la ciudad una guarnición del Ejército Rojo.
Cuando llegamos damos un paseo por el centro y vemos la Nikolaikirche, totalmente reconstruida, que formaba parte del palacio Real, que era un modo de simbolizar la unión entre el poder político y religioso. Se inspiró el arquitecto en Sant Paul Cathedral de Londres. A la derecha de la iglesia con dificultad porque está todo en obras se ve el Altes Rathaus, antiguo ayuntamiento que ahora acoge exposiciones temporales.
Hay un Museo del Cine justo al lado de las caballerizas reales en Breite Str. donde se han recreado los camerinos de las más famosas actrices de la década de los años 30, otra sección del cine prohibido dedicada al cine expresionista y una lista de 1532 nombres de personalidades del mundo del espectáculo emigrados, perseguidos o asesinados entre 1933 y 1945. Nosotros no entramos porque preferimos, a pesar del frio, pasear por la ciudad.
Vemos por fuera la Dampfmaschinenhaus, ya que solo está abierta de mayo a octubre, es una cisterna tambien conocida como la mezquita por su estilo árabe, que fue construida en 1841 para alimentar las fuentes del parque de Sansouci. Se trata de una máquina de 80 caballos oculta en el interior de un curioso edificio inspirado en la Alhambra. La bomba se pone en marcha cuando entran los visitantes. Cerca hay una zona en torno a Feuerbachstrasse, una zona de mansiones del siglo XIX donde viven las familias prominentes de la ciudad.
Vamos subiendo por Fr. Ebert Str. hasta la Nauener Tor que es una puerta muy bonita con torreones donde hay unas terracitas que a estas horas matinales da el sol y la gente se pone a leer el periódico y toman su cafetito a pesar de la temperatura gélida. Eso sí hay unas mantitas de Ikea para ponerse por las piernas. Eso son ganas de tomar el sol y lo demás son tonterias.
Justo aquí empieza el Hollaendische Viertel (barrio holandés) que cuenta con 134 casas de ladrillo y tejado a dos aguas, construidas para los obreros holandeses que llegaron en la decada de 1730 invitados por el rey Federico Guillermo I. Las viviendas se han restaurado y en la actualidad albergan galerías de arte, restaurantes o cafeterías.
Bajamos hacia la Branderburger Tor, otra puerta monumental pero no tan bonita (según nuestro gusto) como la anterior, que es un arco de triunfo levantado en 1770 para conmemorar la victoria de la guerra de los 7 años.
Allí cogemos un bus que nos lleva al Park Sanssouci. Desde la estación de trenes donde hay una oficina de turismo nos han dicho que se puede coger el 695 o el X15. En una superficie de 290 Ha, Federico el Grande encargó la realización de los edificios del interior a Wenzeslaus Knobelsdorff, quien tomó como modelo la simetría del Palacio de Versalles, logrando una perfecta armonía entre naturaleza y arquitectura. Está declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. El Obelisk Portal, la entrada principal, marca el comienzo de Hauptallee, la gran avenida principal de 2,5 Km que divide longitudinalmente el parque.
Cuando llegamos vamos a la oficina de venta de tiquets porque sabemos que dan hora y a nosotros nos la dan al cabo de 1 hora. Parece que en verano el tiempo de espera puede ser mayor. Cuesta 8 €, pero si se tiene tiempo y ganas venden un pase para un día por 19 € que te da acceso a 30 palacios y jardines de todo Brandenburgo. El horario de este palacio es de 9 a 16 de noviembre a marzo y el resto hasta las 17 horas. Los lunes está cerrado.
Para más información esta pagina puede ir muy bien: http://www.potsdam-tourism.com/.
Mientras llega la hora de nuestra visita damos una vuelta por lo jardines, donde hay el Historische Mühle, un molino de viento de estilo holandés del siglo XVIII.
La Orangerie es un palacio inspirado en el Renacimiento italiano, con una fachada de 300 metros de longitud, más bonito de ver desde lejos con la perspectiva del jardin y la doble escalinata. Era un palacio de invitados y ahora alberga reproducciones de obras pictóricas destacando 47 del pintor Rafael. Abierto de mayo a octubre.
El Palacio de Galería de pinturas, Bildergalerie, se exponen pinturas de Rubens, Van Dyck, Caravaggio y otros famosos artistas. Abierto de mayo a octubre. Está considerada como una de las mejores colecciones de Alemania.
La casa china o Chinesisches Haus, expresa el gusto de la época por lo chino. Abierto de mayo a octubre.
La Rondell del grosser Fontäne, es un estanque circular con dos hermosas reproducciones de Venus y Mercurio que Luis XV de Francia regaló a Federico II el grande. Está situada al pie de las 6 plantas de invernaderos que reciben el nombre de terrazas de la colina de la vid. Ahora está casi totalmente helado con un trocito donde no hay hielo y hay unos patos y unos cisnes.
Vamos a la visita donde nos dan unas audioguias en español y poniendo el número que pone en cada estancia nos explica largo y tendido todas las curiosidades de este palacio cuyo nombre significa "sin preocupaciones".
Su construcción fue debida a Federico II el grande que quería un lugar de descanso!!!!!!, donde pudiese reunir a artistas, poetas y filósofos y en el que componer e interpretar música. La visita comienza en el vestíbulo con columnas corintias y techo cubierto de frescos. La Marmorsal es de 1747, donde se encuentra el busto de Voltaire, uno de los pensadores que pasó largas temporadas en palacio. Las salas más interesantes son la sala de Conciertos y los aposentos de las Damas, entre los que se encuentran el saloncito que ocupaba el escritor Voltaire. La visita dura menos de 1 hora pero es muy instructiva.
A más de 1 km está el Palacio Nuevo o Neues Palais, palacio edificado tras la guerra de los 7 años para poner de manifiesto el poderío de Prusia. El edificio es excesivo tanto en las proporciones como en la decoración: 428 esculturas y cúpula central adornada y coronada por Tres Gracias sustentando la corona de Prusia. Las doscientas estancias que tiene el palacio están decoradas en estilo rococó, destaca la Grottensaal, adornada con incrustaciones de conchas y minerales en las paredes, la Marmorgalerie enorme salón de banquetes revestido de marmol blanco de Carrara con un maravilloso fresco en el techo, la sala de caza que contiene montones de animales disecados y una exquisita traceria de oro en las paredes, etc.
En el ala sur el Schlosstheater ofrece conciertos de música clásica los fines de semana, pero ahora está en obras.
Ya estamos hartos de tanta belleza y palacios y cogemos un bus que nos lleve a la estación, de camino pasamos por Alexandrowka, que es un barrio creado en 1826 en honor del zar Alejandro I y su victoria sobre Napoleón. Consta de 13 casas de estilo ruso concebidas para alojar a los soldados del coro del ejército, un regalo del zar al Kaiser. Son edificios de mampostería, revestidos de troncos como las antiguas casas rusas. También declarado como patrimonio de la Humanidad.
Cogemos el tren de vuelta y como nos deja en el parque zoológico cogemos el bus nº 200 que así nos pasea por las zonas más emblemáticas de Berlin. Llegamos al final que no tiene gran interés y después vuelta para atrás. Nos acercamos a Potsdamer Platz que antes de la guerra era la zona de mayor actividad comercial y cultural de la ciudad y fue la que salió peor parada durante la guerra y la posguerra. Durante décadas tuvo el aspecto de un desolado páramo, si bien en los últimos años lo han convertido en referente de la arquitectura contemporaneo en Europa; los edificios futuristas y el moderno conjunto del museo la han convertido en una de las favoritas de los turistas como nosotros. Nos encontramos con el Ministerio de Correos y Telecomunicaciones, la Haus der Ministerien donde trabajaba Hermann Goering, que es un inmenso edificio, con más de 1000 estancias construido en 1936 y que sobrevivió a todos los bombardeos y demoliciones. Es un ejemplo vivo de la arquitectura nazi de Berlín. Aquí también se encontraba en los jardines de la antigua cancilleria el bunker que el Führer se hizo construir en 1943.
El edificio Daimler-Chrysler, el gran hotel explanade, el Sony Center, la sede de la Mercedes Benz, el Kulturforum, la Philarmonie, etc etc, son edificios que hay en esta plaza y que quitan el hipo.
Por la noche es espectacular todo iluminado con miles de luces que destacan esta maravillosa arquitectura.
Cogemos el tren de vuelta y como nos deja en el parque zoológico cogemos el bus nº 200 que así nos pasea por las zonas más emblemáticas de Berlin. Llegamos al final que no tiene gran interés y después vuelta para atrás. Nos acercamos a Potsdamer Platz que antes de la guerra era la zona de mayor actividad comercial y cultural de la ciudad y fue la que salió peor parada durante la guerra y la posguerra. Durante décadas tuvo el aspecto de un desolado páramo, si bien en los últimos años lo han convertido en referente de la arquitectura contemporaneo en Europa; los edificios futuristas y el moderno conjunto del museo la han convertido en una de las favoritas de los turistas como nosotros. Nos encontramos con el Ministerio de Correos y Telecomunicaciones, la Haus der Ministerien donde trabajaba Hermann Goering, que es un inmenso edificio, con más de 1000 estancias construido en 1936 y que sobrevivió a todos los bombardeos y demoliciones. Es un ejemplo vivo de la arquitectura nazi de Berlín. Aquí también se encontraba en los jardines de la antigua cancilleria el bunker que el Führer se hizo construir en 1943.
El edificio Daimler-Chrysler, el gran hotel explanade, el Sony Center, la sede de la Mercedes Benz, el Kulturforum, la Philarmonie, etc etc, son edificios que hay en esta plaza y que quitan el hipo.
Por la noche es espectacular todo iluminado con miles de luces que destacan esta maravillosa arquitectura.